Un fuego masivo envolvió la catedral de Notre Dame en París, destruyendo el techo e impactando a Francia y al mundo, los bomberos lograron salvar los campanarios principales y las paredes exteriores del colapso.
El fuego empezó, en la parte superior de la catedral y
está potencialmente relacionado a los trabajos de renovación de la edificación,
pero el fiscal de París, Remy Heitz, dijo que no había indicios obvios de que
el incendio fuera provocado.
Se necesitaron más de 400 bomberos para sofocar el fuego
que consumió el techo y colapsó la aguja de la catedral.
El rector de Notre Dame, Patrick Chauvet, anunció que
tras el incendio, se lograron salvar dos
de los objetos religiosos más relevantes que albergaba la catedral: la reliquia
de la corona de espinas y la túnica de san Luis; el primero corresponde a la
corona que los soldados romanos colocaron a Jesús de Nazaret durante la
crucifixión, el segundo es un jubón que supuestamente perteneció al rey Luis IX.